Ernesto Bustos B.
Las cosas avanzaron con rapidez. En menos de un año presentaban el álbum Madretierra, del que llamaron la atención sus versiones para las tradicionales "Casamiento de negros" y "Mi abuela bailó sirilla", y las nuevas composiciones de Jorge Soto ("Hermanos", "Turrón de amor", "Madre tierra") y la cantante Sol Domínguez ("La llave"). Entre espacios universitarios e incluso algunas radios comenzó así a difundirse este tipo de sonido sin comparación entonces. En momentos de grandes dificultades para el trabajo musical, Sol y Medianoche llegó incluso a televisión (en programas como "Chilenazo").
Arranca arranca: el nacimiento de un sello
1983 comenzó con una invitación hecha por Maitén Montenegro para grabar en un disco en vivo en el Galpón Los Leones. En ese álbum, el grupo incluyó nuevas versiones para temas de Violeta Parra ("Arranca arranca", "Corazón maldito"), Víctor Jara (su traducción de "El martillo") y nuevas composiciones de la dupla Domínguez-Soto. La cantante había iniciado para entonces una búsqueda en la cultura mapuche. Convivió unos meses en el sur de Chile con comunidades indígenas, impregnándose de sus tradiciones, ritos y costumbres. Consiguió allí una autorización espiritual para vestir atuendos típicos, que Sol Domínguez subió desde entonces a los escenarios. Muchas fotos de la época la muestran a pies descalzos, y con trarilonco y un trapelacucha tradicionales.
Los discos se sucederían. Tras la aparición de Madretierra, EMI adquirió los derechos del álbum y el grupo grabó con ese sello su siguiente trabajo, 33°30' Latitud sur (1984), y luego sería publicado Querida mamá (1985). La mezcla de folclor y rock y de sonidos e indumentaria mapuche se volvió un referente para la juventud, que aceptó aquel contraste impuesto por una mujer con marcados rasgos caucásicos en contraposición a nuestros antepasados. América paz (1990), el siguiente registro, tiene un título inspirado en la hija del matrimonio Domínguez-Soto, y una nueva combinación de canciones de Violeta Parra y composiciones propias.
Poetas y cantores: regreso sin rencor
La presencia de la banda en los programas "Sábados gigantes", "El festival de la una" y "Éxito" fue habitual durante la segunda mitad de los '80 y primera mitad de los '90. Y tras un silencio prolongado por algunos años, el grupo retomó el camino de la música de manera sostenida en 2003.
No hay rencor en Sol y Medianoche. Atrás quedó la época en que fueron censurados en varios escenarios del país, por lo menos según lo graficó Sol Domínguez en una entrevista con el diario La Estrella de Valparaíso en 2004. Ahí la cantante detalló pasajes oscuros de la época de 33º30' Latitud sur, cuando el gerente del sello les informó que existía una lista de recintos a nivel nacional donde la banda estaba vetada por "agitadora de masas". El grupo no tenía connotaciones políticas, explica la cantante. "Pero en el fondo había razones, porque la gente que iba a nuestros recitales aprovechaba de gritar lo que quería".
En 2007 fue lanzada una nueva edición de ese mismo disco, y en el mismo año la banda se presentó con éxito en el ciclo El ADN del rock organizado por la revista El Carrete. Sol y Medianoche fue también uno de los grupos de mayor trayectoria convocados en enero de 2009 a la segunda versión de la Cumbre del Rock Chileno celebrada en el Club Hípico de Santiago, y para entonces ya había anunciado su nuevo disco, el primero casi dos décadas de historia. El nuevo trabajo lleva por titulo Poeta y cantor (2009), incluye canciones de Víctor Jara y Violeta Parra, poemas de Pablo Neruda y temas propios de Sol Domínguez y Jorge Soto, acompañados por la presencia de la hija de ambos, la bajista América Paz.
Actualizado el 10 de marzo de 2021