Felipe Martínez

Felipe Martínez
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El flautista, saxofonista y compositor Felipe Martínez ha sido parte de una escuela musical en torno a la fusión latinoamericana, variada en ritmos, sonidos, aires e inspiraciones, que desde inicios de los ’90 vivió una reapertura en diversos frentes. Ese trabajo multicolor se ha visto reflejado tanto en sus colaboraciones con músicos como Antonio Restucci, Juan Coderch, Marcelo Aedo y Juan Antonio Sánchez, como en sus partituras para teatro, su trabajo como sesionista y su actividad solista.

Ficha

Fechas

Santiago - 16 de mayo de 1968

Región de origen

Metropolitana de Santiago

Décadas

1990 |2000 |2010 |2020 |

Géneros

Grupos

Felipe Martínez

El flautista, saxofonista y compositor Felipe Martínez ha sido parte de una escuela musical en torno a la fusión latinoamericana, variada en ritmos, sonidos, aires e inspiraciones, que desde inicios de los ’90 vivió una reapertura en diversos frentes. Ese trabajo multicolor se ha visto reflejado tanto en sus colaboraciones con músicos como Antonio Restucci, Juan Coderch, Marcelo Aedo y Juan Antonio Sánchez, como en sus partituras para teatro, su trabajo como sesionista y su actividad solista.

Iñigo Díaz

Formado en la flauta traversa clásica con Eliana Orrego en el Conservatorio, Martínez se fue orientando hacia la música popular, la fusión y el jazz. Entonces tomó como maestro al histórico saxofonista Patricio Ramírez. Entre 1990 y 1993 formó parte de los grupos de apoyo del mandolinista, guitarrista y compositor Antonio Restucci, legítimo impulsor de la nueva fusión latinoamericana, quien había arribado de una estada en España con nuevos elementos del flamenco y la música contemporánea. Martínez alternó ese aprendizaje con apariciones en el Club de Jazz de Ñuñoa para tocar con músicos generacionales: el saxofonista Ignacio González, el guitarrista Daniel Lencina hijo, la contrabajista Alejandra Santa Cruz y la nueva estrella del jazz de inicios de los ’90, el trompetista Cristián Cuturrufo.

A fines de los ’90 comenzó a trabajar como autor de música para teatro. Escribió y tocó la música incidental de la obra Sostiene Pereira (1997), de Ictus. Luego compuso piezas para la trilogía de memoria política de Chile que montó la compañía La Trompeta: Por encargo del olvido (2001), Toda esta larga noche (2002, de Jorge Díaz) y Naturaleza muerta (2003). En 2004 llegó al cuarteto de jazz fusión La Saga, para ocupar la plaza del fallecido Eloy Alquinta. Para ese proyecto escribió las composiciones “Remolinos” y “Paso a paso”, editadas en el disco Desde la tierra (2008). Sería la misma estética de mestizajes la que Martínez utilizaría luego en su primer proyecto ciento por ciento personal, traducido en el disco Sudalma (2012), una reflexión contemporánea sobre ritmos ternarios tradicionales sudamericanos.

Actualizado el 25 de octubre de 2022