Marisol García

Hijos de una cantora tradicional de la provincia de Colchagua, los hermanos Hilda, Juan, Gabriel y Benjamín Morales aprendieron desde niños sobre el arte de recopilar canciones y componer según las estructuras tradicionales en el campo chileno, ganando oficio todos ellos tanto en el canto como en la interpretación de guitarra, rabel, arpa y percusión. Tanto probó ser su entusiasmo, que a mediados de los años 70 se animaron a ampliarse del circuito familiar y comunitario, y participar de un festival folclórico en Santiago. Ganaron el voto del jurado y luego una grabación profesional. Recién entonces los hermanos buscaron un nombre para su conjunto, y decidieron quedarse simplemente para los créditos y anuncios de su trabajo como Los Hermanos Morales.

En 1978 se publicó ese primer cassette, por el sello Alerce. Accedió a presentarlo nada menos que Margot Loyola luego de haberlos escuchado en vivo. Recomendó la maestra:

Las interpretaciones, las versiones musicales y las voces de los Hermanos Morales nos parecieron, sobresalientes. En sus muestras no hay «remedo», ni caricatura, ni superficialidad. Tampoco afán de lucimiento, ni búsqueda de artificios ajenos a las expresiones que ellos cultivan. Cantan íntimamente desde adentro, con recato, gracia y simplicidad, como lo hacen en su tierra de origen, como la tierra se los enseño. Son raíz, tronco y rama, nacidos y alimentados en la tradición. Sus proyecciones tienen valor verdaderamente documental. Quienes no conozcan el campo y sus gentes pueden iniciarse en su conocimiento y emoción a través de las voces de los Hermanos Morales.

Esa primera publicación les dio pie para metas más altas, y al año siguiente llegaron al Festival del Huaso de Olmué, a defender una canción de Pedro Yáñez. Su interpretación para "El yerbatero montañés" fue un éxito, y los dejó como los ganadores del certamen. Durante los años ochenta y noventa, el conjunto se mantuvo grabando y presentándose en vivo, como voces autorizadas del cultivo y aporte al acervo del folclor del Valle Central chileno.

El fallecimiento de Benjamín, en 2005, determinó la disolución de la sociedad filial en el conjunto. Los otros tres hermanos mantuvieron algún tipo de vínculo con la música, destacando sobre todo la labor de investigación, gestión y nuevas grabaciones que ya como solista continuó desarrollando Gabriel Morales.