En tercer disco de Paz Quintana realizado durante su vida en México es una suerte de nuevo manifiesto. Los reinos de la naturaleza aparecen de mil maneras entre las canciones de Animales, en el que la escurridiza joven compositora que fue en los tiempos de Tizana termina transformada en algo parecido a una alquimista musical. En una búsqueda de sonidos que contempla lo orgánico y lo inorgánico, entre el canto puro, la música pop y la electrónica, la misma Paz Quintana que antes se había escondido tras la máscara de un conejo blanco en el disco Natural (2015), reflexiona ahora acerca de más animales, árboles, hongos, estrellas, semillas, cauces y aguaceros. Y en sus textos habla, como anticipándose al estallido social de octubre de 2019 y en medio de la crisis medioambiental de la década, de la materialidad del cuerpo y de las energías que rodean al ser humano en tiempos de crisis. —Antonio Voland