Alberto Cumplido

Alberto Cumplido
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El triángulo de los guitarristas de fusión tiene en sus vértices nombres clave: Antonio Restucci (n. 1956), Juan Antonio Sánchez (n. 1965) y Alberto Cumplido (n. 1958). Mientras Restucci dejó el grupo La Hebra y Sánchez emigró de Entrama, Cumplido fue el único que se mantuvo activo como compositor y solista y en su calidad de líder de Quarto Mundo, un ensamble para el que preparó un extenso catálogo de obras acústicas, basadas en la mezcla de música contemporánea, étnica fusionada y jazzística, que hicieron del músico una de las llaves de la guitarra moderna. Asimismo, Cumplido es el creador, gestor y director del festival Entrecuerdas, que desde el año 2000 ha marcado el pulso de la guitarra en su más amplio espectro.

Ficha

Fechas

Santiago - 06 de agosto de 1958

Región de origen

Metropolitana de Santiago

Décadas

1970 |1980 |1990 |2000 |2010 |2020 |

Géneros

Grupos

Alberto Cumplido

El triángulo de los guitarristas de fusión tiene en sus vértices nombres clave: Antonio Restucci (n. 1956), Juan Antonio Sánchez (n. 1965) y Alberto Cumplido (n. 1958). Mientras Restucci dejó el grupo La Hebra y Sánchez emigró de Entrama, Cumplido fue el único que se mantuvo activo como compositor y solista y en su calidad de líder de Quarto Mundo, un ensamble para el que preparó un extenso catálogo de obras acústicas, basadas en la mezcla de música contemporánea, étnica fusionada y jazzística, que hicieron del músico una de las llaves de la guitarra moderna. Asimismo, Cumplido es el creador, gestor y director del festival Entrecuerdas, que desde el año 2000 ha marcado el pulso de la guitarra en su más amplio espectro.

Iñigo Díaz

Sus orígenes están en el rigor del conservatorio. Desde los doce años se adiestró en la guitarra clásica con el maestro Luis López (el primer intérprete chileno de esta modalidad) y a los dieciocho era concertista. Tocaba en solitario o delante de la Orquesta de Cámara de la Universidad Católica con repertorio de obras barrocas de Bach, Vivaldi o Handel. Pero pronto una puerta nueva se iba a abrir mientras estudiaba composición con Cirilo Vila en el antiguo Taller 666: era la música del siglo XX para guitarra, que para él contenía una fuerte carga de misterio poético. Entonces comenzó a investigar la obra contemporánea del cubano Leo Brouwer, el inglés Benjamin Britten o el japonés Toru Tkemitsu.

En 1981 y 1983 viajó a los festivales de guitarra de Martinica. En su primer viaje tomó contacto con el propio Brouwer y en el segundo con el brasileño Egberto Gismonti. Un encuentro fundamental pues el vanguardista erudito terminó siendo su principal influencia como estética de creación. En 1983, en su estadía en Barcelona, comenzó el vínculo con los mundos de la fusión y el jazz, que aún permanecían lejanos para Cumplido. Formó el grupo Quarto Mundo, alternando músicos-inmigrantes de todo el orbe que dieron forma y sonido a sus primeras composiciones para cuarteto acústico e instrumentos étnicos, variante que Cumplido siguió desarrollando por más de veinte años.

Ya instalado en Berlín, en 1986 viajó a Chile y grabó para Alerce su primer disco: Carreteras del tiempo (junto a músicos de fusión como el saxofonista Cristián Crisosto o el percusionista Alejandro Reid). En 1991, en su etapa de Hannover, compuso música para danza, teatro y cine, y estudió composición con el maestro Gustavo Becerra. En 1999 terminó su itinerancia por cuatro continentes y regresó a Chile para montar una nueva versión de Quarto Mundo, esta vez configurado por músicos nacionales: el violista Claudio Gutiérrez, la contrabajista Alejandra Santa Cruz y el baterista Cristóbal Rojas. El cuarteto chileno grabó Atemporal (2000, junto al cuarteto de cuerdas Sur) y luego el guitarrista llegó a su siguiente álbum, Eólico (2003, en dueto con el percusionista Ricardo Vivanco).

Alberto Cumplido permaneció activo no sólo en la creación musical al escribir obras contemporáneas para los cuartetos de cámara Quadrivio e Iniesta, sino también en el ámbito de la poesía, con material original incluido en La noche de la loba (1985), Bajo la influencia del go (1995) y Morada del hastío (2000), y en la gestación de masivos encuentros de música. En 1998 produjo una primera cumbre de guitarras, con Antonio Restucci, Emilio García y Ángel Parra.

El tejido de las cuerdas
Además de poeta, su rol como gestor alcanzó una siguiente dimensión cuando fundó el festival de guitarras Entrecuerdas. Llegó a ser el mayor encuentro alrededor del instrumento, iniciado en el Goethe Institut el año 2000 con las visitas de los renombrados solistas argentinos Juan Falú y Cacho Tirao, además de guitarristas clásicos chilenos como Óscar Olhsen y Luis Orlandini. De la mano de Cumplido, Entrecuerdas creció y se consolidó mostrando al público las diferencias de lenguajes de la guitarra clásica, contemporánea, experimental, la guitarra flamenca, de fusión, de jazz y la guitarra criolla y traspuesta, además de abrir espacios a otros cordófonos del mundo. En distintas ediciones, llegaron al festival solistas mundiales como Leo Brouwer, Yamandú Costa, Marco Pereira, Marcin Dylla, Niño de Pura o Susan Weinert, por mencionar algunos.

A lo largo de las décadas de 2000, 2010 y 2020, la cita pusó en escena a guitarristas de todas las líneas: Sergio Sauvalle hijo (raíz folclórica), Romilio Orellana (clásica) Jorge Díaz (jazz), Ramiro Molina (avant-garde) o Elizabeth Morris (fusión latinoamericana), entre muchos solistas que se fueron sumando con el tiempo. Y en 2024, con motivo de la conmemoración de los 25 años de Entrecuerdas, Alberto Cumplido compuso el concierto para guitarra y orquesta "El péndulo invisible", que fue estrenado en el Aula Magna de la Escuela de Derecho de la U. de Valparaíso por el guitarrista Luis Guevara y la Orquesta Marga Marga.

Actualizado el 11 de octubre de 2024