Luis Felipe Saavedra

La carrera del guitarrista, pianista y cantante comenzó hacia el año 2000 en el Campus Oriente de la Universidad Católica de Chile, donde junto a compañeros de la carrera de Letras formó el cuarteto Zabala para interpretar versiones de sus bandas favoritas y musicalizar recitales de poetas como Héctor Hernández o Paula Ilabaca, pero que derivó en composiciones propias de estilo postrock y una activa presencia en escenarios capitalinos. En esa misma época, Jarque  colaboró con la creación y producción de música para las obras de teatro Los poseídos (2000) y La micro (2001).

Mientras funcionaba y hasta después de la desintegración de Zabala, Jarque se introdujo en el ambiente de la cueca brava de la mano del legendario Nano Núñez, fundador de Los Chileneros, a quien acompañó como guitarrista y segunda voz en innumerables ocasiones hasta la muerte del maestro, en 2005. Sus colaboraciones como instrumentista continuaron en los grupos Hotel Araña, en la última formación de Elso Tumbay y como tecladista invitado en  Casino. Pero fue en 2006 cuando debutó como solista con el disco Monstruos bajo la cama, un trabajo dramático, de armonías tormentosas y especial énfasis en las atmósferas de guitarras, influenciado por el sonido de bandas inglesas de shoegaze como Ride o My Bloody Valentine.

A la par de su trabajo solista, Jarque continuó con encargos para teatro y cine: compuso la música la obra Don Quijote (2006), interpretó (con su fugaz banda de música klezmer) el tema central de la película de Boris Quercia El rey de los huevones (2006) y aportó canciones para Lo bueno de llorar (2006), del cineasta Matías Bize. Un año antes, Jarque había iniciado el sello LeRockPsicophonique, que con el tiempo se convertiría en su proyecto más duradero junto a Inverness, el cuarteto que formó como paso natural de su trabajo solista.