Solo medio año después de publicar Seis, su disco ciento por ciento mexicano, Mon Laferte puso en circulación otro álbum autoral, realizado en condiciones sumamente particulares. Se escribió y se produjo junto al músico Sebastián Aracena entre marzo y julio de 2021, durante un paso por Los Angeles que para ella tenía como propósito quedar embarazada. La canción "Niña", que se sostiene en un espíritu y sonido de retro pop, subraya ese acontecimiento: "Te he esperado tanto y te cuidaré", canta Mon Laferte. Aunque la secuencia lógica comienza antes, con "Placer Hollywood", otra crónica impresionista y otro ejemplo del gusto de Mon Laferte por la música de los años '60: "Qué bueno revolcarnos en el día de la mamá", canta sobre guitarras submarinas, en castellano, pero también en francés e inglés. De hecho casi la mitad de las letras están escritas en inglés y cantadas con un bonito acento: "Good boy", "Beautiful sadness", "A crying diamond". Desde que encontró su lugar en el mundo, Mon Laferte había abrazado la canción melodramática, doliente y triste como manifiesto. Pero en 1940 Carmen, que es la dirección del Airbnb que ella ocupó durante esa temporada en California, se expone un pop mucho más luminoso y optimista, acorde con los tiempos que vivía la cantautora y futura madre de 38 años. "Algo es mejor" es la canción que define ese paso. Otras a buen ritmo son "Zombie" y "Supermercado", donde ella también exhibe su gran instrumento vocal. Y si "Niña" marca una alegre bienvenida, la tristeza nunca desaparecerá del todo de la música de Mon Laferte, expuesta aquí en la despedida en estilo sesentero de "No soy para ti". —Iñigo Díaz