«Crónicas y memorias del rock en la región de Coquimbo» presenta el subtítulo de este trabajo con un foco poco frecuente en la bibliografía sobre música chilena: la actividad de una ciudad nortina, con rica tradición rockera pero hasta ahora escasa presencia en medios masivos (tan centralistas, como casi todo en nuestro país). Por eso, el libro parte desafiante:

«Este trabajo, tiene por misión abrirles los ojos a todos los que creen que no hay rock nacional fuera de Santiago, Valparaíso, Concepción y Valdivia (con suerte)».

En adelante, y a través de un trabajo que incluyó más de cien entrevistas y la consulta de archivos, el autor consigue desplegar un mapa colorido de bandas y solistas,  locales nocturnos desaparecidos, de instrumentos y su fabricación, de viajes y de importaciones. Es una investigación que a un lector fuera de Coquimbo le parecerá probablemente más nutrida de lo que esperaba. Además de los nombres de fama puramente local, se cruzan en el relato también Jorge Peña Hen, Los Viking’s 5, los hermanos Cuturrufo y Óscar Arriagada; coquimbanos de nacimiento o de encuentros relevantes con la región. Se recuerda así que la actividad rockera de La Serena, Ovalle, Illapel y la ciudad-puerto de Coquimbo ha crecido en simultáneo a la de urbes más extensas, interactuando con ella (se registra, por ejemplo, el paso de Los Prisioneros, antes de su fama) y a veces marcando señas pioneras. Los Teenagers y Los Lazer (ex Jet Black) son ejemplos de bandas rocanroleras ya activas a fines de los años cincuenta; en algunos casos, hasta con grabaciones. Sólo ese dato obliga a revisar lo escrito hasta ahora en la cronología del rock chileno.

El libro se encuentra disponible para descarga gratuita.