Carlos Costas

En inglés y castellano
Con reminiscencias del sonido de Pantera y del aggro-metal, Requiem editó por Toxic un primer disco, Unlike (1997), con letras en inglés y una colección de canciones que ellos denominaron conceptual, y que tuvo su mayor exposición en el teloneo a Testament, en 1997. Al año siguiente y luego de una autocrítica interna, nuevos cambios de integrantes permitieron una nueva etapa, en la que Rékiem —desde entonces con 'k'— se decidió por el trabajo con letras en castellano y la ubicación en primera línea de la escena nü-metal chilena. De esa época data su participación en la banda sonora de la primera película local de terror, Ángel negro (con el tema “Claroscuro”).

El 2001 editan Apgar:0, un disco marcado por su tono amargo, un discurso muy crítico y afiladas referencias políticas. El sonido combinaba la crudeza de los riffs de guitarra con melodías y atmósferas y consigue cierta exposición radial y televisiva, incluyendo el teloneo de Deftones en el Estadio Víctor Jara y su ingreso a la programación del MTV latino, en un hecho no menor considerando lo lejos que se sitúa el rock duro de los circuitos masivos de la música en Chile.

Apgar: 10 (2002) fue el disco siguiente, compilación de shows en vivo que incluyó la apertura para Korn y un cover de Faith No More, gran influencia de la banda, que ya a esas alturas contaba con el tecladista Daniel Pierattini. Eran los tiempos del auge del aggrometal en Chile, Rékiem lideró la escena impulsando los exitosos festivales AggroFest que generó lazos con otras bandas latinas y que les permitió actuar en Perú.

A mediados del 2004 Rékiem anunció por primera vez una separación, aunque sin prever el drama que se los llevaría a reunirse. Poco después de que Pierattini y Durney decidieran seguir carrera en el grupo Zero, este último decidió acabar con su vida (noviembre de 2004). La noticia sacudió a todos los integrantes del grupo, quienes decidieron intentar continuar unidos su trabajo. Con nuevo guitarrista, el álbum Zero (2005) simbolizó esa voluntad de persistencia. Sin embargo, ya en el 2009, el grupo anunció su última despedida. En un comunicado subido a su web, Rekiem explicó que «hemos decidido terminar este largo proceso juntos sin tristeza, sino que con la alegría de lo vivido, lo logrado; y poder dejar descansar en paz a nuestro gran hermano Julián Durney». Se confirmaba así el final de Rékiem.