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Gianluca Abarza era un colegial aficionado al rap y la electrónica cuando comenzó a experimentar con la música en su computador, pero fue cuando pasaba una temporada como estudiante de arte que se dedicó de lleno a ella. “Quemando billetes” fue una primera canción que publicó entonces en Youtube y “Siempre triste” fue la que se convirtió en un fenómeno en la misma plataforma. Producida por Young Cister, apareció en 2017 junto a un videoclip que lo mostraba dentro de una sencilla piscina, sosteniendo un melón con vino, y sumó cientos de miles de reproducciones en poco tiempo. Para un segmento de medios y público local, Gianluca se convirtió así en sinónimo de trap y hasta convivió con el impreciso mote de “Príncipe del trap chileno”, que acompañó numerosas entrevistas y publicaciones en medios de comunicación.

No obstante, los años posteriores mostraron que sus intereses traspasaban los márgenes de ese género, que además tenía otras figuras más representativas. Por una parte, sus primeras grabaciones y el primer disco oficial, Yin yang (2019), dialogaron también con el reguetón, el pop y la electrónica. Por otra, aunque un recuento de colaboraciones de aquel momento incluía a artistas urbanos como Pablo Chill-E, Ceaese, Polimá Westcoast y Young Cister, también se enlazaba con nombres diversos como Princesa Alba, Javiera Mena, Rubio, Gabriel Rammsy y Gepe, a quien llegó a acompañar en su homenaje a Margot Loyola.

Incorporado al sello Quemasucabeza, Gianluca viajó en 2019 a ciudades de España, México, Estados Unidos y Canadá y a inicios de 2020 presentó Yin yang con un concierto en el Teatro Teletón. El mayor alcance que había logrado su música y la intensa agenda de lanzamientos y conciertos que tenía entonces, sin embargo, tuvieron un cambio de ritmo: poco después de publicar G love 2 (2020), recibió múltiples críticas por su reacción ante una denuncia de violación en contra del cantante Renzo Pikette, su amigo. El hecho implicó además el quiebre de la pública relación amorosa que entonces mantenía con Princesa Alba. “Estuvo bien que pasara, aprendí un montón de cosas”, admitió más tarde sobre el episodio.

2022 fue entonces un momento de reactivación para Gianluca: publicó Minion mixtape y casi una decena de singles, que marcaron una relativa distancia con la oleada de música urbana que se había vuelto dominante. “Siempre he tenido un pie adentro y un pie afuera del urbano, de lo alternativo, de distintas influencias musicales”, advirtió en ese momento, cuando la música urbana ya se identificaba a nivel masivo con otras figuras, como Polimá Westcoast, Pailita, Marcianeke y Cris MJ.