Gabriela Bade
Otro nombre para el éxito
Apoyado en un seudónimo sin relación con su nombre civil (Marco Antonio Orozco Betancourt, Cristóbal saltó a fines de los años 70 del Liceo Lastarria y los festivales de colegio al segmento juvenil del programa "Sábados Gigantes", el más exitoso de la televisión local en esa época. Su canción "Una niña, una historia", traducción suya para un tema italiano, lo convirtió en 1979 en un fenómeno popular, al cual no tardaron en sumarse cotizados colaboradores, como el manager Jorge Mackenna (el mismo que había trabajado antes con varios músicos de la Nueva Ola y, especialmente, con José Alfredo Fuentes). Así, su entrada a la industria de la música fue con ambiciones profesionales, como parte de una generación de intérpretes asociados a la cultura pop en TV, y que entonces incluía también a nombres como Eduardo Valenzuela, Sebastián, Alejandro de Rosas, Rodolfo Navech, Juan Antonio Labra y más tarde Luis Jara.
La distinción de Cristóbal estaba en la orquestación de grandes baladas de arreglos atemporales (muchas veces, orquestados), capaces de superar la barrera de la televisión y los años. En 1980, Cristóbal fue a competir al Festival de Tokio, en el cual fue reconocido como mejor intérprete. Dos años más tarde, obtuvo el tercer lugar en el festival sudcoreano "Seul Songs". A su regreso, presentó una canción aún más importante que la anterior: "Basta ya" tuvo amplia difusión en las radios y en televisión y fue destacada también en el programa televisivo "Aplauso", suerte de espacio satélite del festival de Viña del Mar.
Su mayor triunfo llegó en 1984 con "Se te olvida", con la que Cristóbal ganó el Festival de Viña y comenzó a hacerse de fama internacional. La canción, (compuesta por Héctor Penross, un empleado de la mina El Teniente), fue grabada más tarde por el cantante español Dyango y hasta incluida en la banda sonora de una teleserie brasileña (Loco amor). Cristóbal se mantuvo ocupado un largo tiempo con giras por Chile y el exterior.
Temporal retiro
Cuando la actividad musical empezó a bajar su intensidad, hacia fines de los años '80, Cristóbal y su esposa formaron una empresa de banquetes, la cual lo alejó de la música. Durante la década siguiente aparecieron varios compilados de sus canciones, tales como Cristóbal internacional (Alerce) y otros con grabaciones antiguas guardadas hasta entonces por los sellos BMG y Arci Music.
En 1998 el cantante decidió retomar su actividad musical, y viajó a Suecia para actuar ante comunidades de chilenos residentes. El entusiasmo lo llevó a grabar un disco de canciones originales, su primer larga duración propiamente tal, presentado en 2003 bajo el título Amor del bueno. Pero el disco no logró mayor impacto, y Cristóbal volvió a retraerse.
Cuando en el año 2005 recibió una invitación del programa televisivo "Rojo VIP", no dudó en sumarse a la lista de diecinueve cantantes chilenos semiolvidados, todos con la meta de recuperar su fama perdida. Cristóbal resultó uno de los más favorecidos, pues su voz se mantenía en buena forma y sus canciones probaron estar atadas a la historia colectiva del país. Como parte de la estructura del espacio, su nombre apareció en cuatro de los CDs que se pusieron a la venta en quioscos, así como en un nuevo disco de éxitos presentado bajo el título Nostalgias Vip.
Para diciembre del 2005, presentaba un nuevo álbum de canciones originales, bautizado Fe y bajo una etiqueta independiente. El disco incluyó un cover para un tema homónimo del primer disco solista de Jorge González. En la grabación se habían reunido muchos de sus colaboradores habituales, todos coordinados por el productor Reinaldo Tomás Martínez.
Actualizado el 01 de enero de 2025