Paulina Cabanillas F. / Iñigo Díaz

Hijo del destacado cantautor Hugo Moraga, recibió de primera mano, y a muy temprana edad, su instrucción musical, la cual combinaba la música de resistencia a la dictadura con bossa-nova brasilera y jazz fusión estadounidense. Ya a los 13 años de edad, se presentó como tecladista en los conciertos de Hugo Moraga, y también junto a Rudy Wiedmaier y los grupos Compañero de Viajes y La Dolce Vita. A fines de los años '80 descubrió su inspiración máxima en el álbum de Herbie Hancock Head hunters (1973), y de ahí en más se decretó el credo, casi religioso, de Moraga-hijo con el funk en sus dimensiones rítmicas, melódicas y estéticas: James Brown, Stevie Wonder, Sly & The Family Stone, Funkadelic y otros.

En 1992, conoció al bajista David Rulo Eidelstein, cuando Esperanza Restucci los invitó a ambos a integrar un nuevo proyecto musical. Su afinidad por el funk, y confesa admiración por el estilo de Pedro Foncea (de De Kiruza), hizo a ambos amigos optar por comenzar con un grupo propio. Lo llamaron, primero, Dr. Funkestein, y completaron luego la formación con dos nuevos integrantes y la presentación pública como Los Tetas. Desde entonces, Moraga fue Cee-Funk, la primera ortografía que llevó su identidad musical.

Chocolate líquido: la emancipación
En paralelo al grupo, el músico venía asumiendo labores de producción para trabajos como Estelas del destino, de Hugo Moraga;  Andanzas (2003), del rapero de estilo raggamuffin Boomer; y en el primer disco solista de Víctor Flores (Solo di Medina) en 2006. Ha participado como invitado en álbumes de Tiro de Gracia, Mamma Soul, Sonido Ácido, CHC, Makiza, Myriam Hernández y los mexicanos Plastilina Mosh y Kinky.

Joya (2006) fue su primera prueba solista, un disco grabado entre Chile y Estados Unidos con una banda integrada por Felipe Felo Foncea (teclados), Roberto Chicho Espinoza (bajo), su hermana Michele Espinoza (voces) y Francisco Pepino González (batería), además del desfile de colaboradores encabezado por Dante Spinetta, Sonido Ácido, Anzuelo, Juan Sativo (de Tiro de Gracia) y el saxofonista de jazz Maxi Alarcón. Su edición coincidió con la decisión del músico de instalarse por un tiempo en la ciudad de San Francisco, en California (por consideraciones legales, su chapa en el mercado de Estados Unidos fue Funky-C).