Canto y trova
Poemas y canciones de amor, de humor o de política fueron parte del oficio del trovador histórico, personaje nacido ya en épocas medievales y que mil años después regresó a la música popular con el mismo sentido. Su figura renació en los años '60, cuando en América Latina y Europa surgieron autores cuyas canciones –interpretadas con la sola compañía de una guitarra- hablaban de sentimientos personales y temas sociales. Canto y trova son formas modernas de expresión del trovador, quien a falta de despliegue instrumental centra el poder de su música en las letras y en su virtuosismo como ejecutante de esa pequeña orquesta de seis cuerdas. Desde Francia a Estados Unidos y desde Cuba a Chile, los cantautores reaparecieron en la década de los grandes cambios. En nuestro país se activó en el marco de la Nueva Canción Chilena y luego siguió con el movimiento joven del Canto Nuevo, pero su oficio es ahora tan genérico que ha superado todas las etiquetas.
El bolero de puerto es un tipo de género musical cargado no sólo por sus señas formales sino también por el involucramiento biográfico que muchos de sus mejores cultores tienen con él. Aunque nació en los años ochenta, Demian Rodríguez está enlazado a esa larga tradición que en Valparaíso y San Antonio marcaron antes de él cantores como Jorge Farías, Ramón Aguilera y Rosamel Araya, y conjuntos como Los Chuchos. Su música es por un lado un homenaje a esa línea de música sentimental y bohemia, pero también la prueba de sus propias dotes de cantautor. Ha elegido insertarse en una historia que le resulta cercana, aportando a ella con nuevas ideas, versos y melodías.
Apadrinada por la baterista Juanita Parra e integrada a conciertos de Los Jaivas en 2009, la cantautora penquista apareció en 2007 en los circuitos universitarios de su ciudad como uno de los nuevos nombres de la canción acústica personal, que alterna el canto solo con guitarra y la influencia del pop. Rocío Peña participó activamente de la primera oleada de músicos cuyos trabajos se propagaron por plataformas de internet.
Patricio Manns es una figura fundamental de la música popular chilena. Su nombre está asociado al nacimiento de la cantautoría en Chile y fue clave en el desarrollo de movimientos como el Neofolklore y la Nueva Canción Chilena. Interpretadas por sí mismo o por otros músicos, en su larga historia como autor impuso piezas que pasaron a ser clásicos del cancionero popular, como "Arriba en la cordillera", "El cautivo de Til Til" y "La exiliada del sur". Manns desarrolló además una prolífica carrera como novelista, ensayista y poeta, y luego de vivir en Francia y Suiza su exilio y residir allí por casi 30 años regresó a Chile, donde continuó escribiendo canciones y libros. Murió en septiembre de 2021, a los 84 años, como uno de los nombres centrales para entender la música chilena.
Desde la atmósfera sadcore del canto con guitarra hacia un pop construido con banda, instrumentos, máquinas y electrónica, Nando García se instaló en la escena de los solistas contemporáneos empujados a la creación de música por la pandemia del covid-19. De hecho, hasta antes del acontecimiento sanitario, había tenido presencia como integrante de los grupos de (Me llamo) Sebastián y Fármacos. Nando García comparte una escena de cantautores en la que se pueden identificar los nombres de Nico Carreño, Martina Lluvias, Simón Campusano, Idea Blanco, Laurela o Clara Löffel. Sus canciones tienen una carga existencialista, como breves párrafos de una autobiografía en estado de avance, y hablan de las enajenaciones en la era digital, que es su época, junto con la inseguridad, el miedo, el fracaso, la homosexualidad, el amor destruido y también la muerte.
Cantautora con aguda mirada hacia su entorno social y desde su interior poético, la penquista Javiera Hinrichs ha desarrollado una trayectoria solista y, desde 2015, junto a la compañía teatral La Obra, como directora musical e intérprete. Es, además, tecladista y vocalista de la banda Pájaro Aletheia, que publicó un primer disco en 2019. Guitarrista y pianista, tiene dos EP propios, influenciados por el folk, el blues y también el folclor sureño, la música de su tierra. Ha mostrado su trabajo musical en ciudades de Chile, Uruguay, España y Francia, y es socia fundadora de la Asociación de Músicos Independientes de Concepción.
Una de las voces más irónicas e incisivas surgidas en el contexto de la Nueva Canción Chilena fue la de Gonzalo Grondona, el Payo. Nacido en Playa Ancha y fogueado al calor de las transformaciones sociales de los años '60, Grondona se convirtió tempranamente en una figura ineludible para hablar del movimiento artístico del puerto, gracias a canciones llenas de humor, solidaridad y sutil denuncia, muchas de las cuales han resultado de una vigencia imbatible.
Cantora popular, intérprete y folclorista son oficios que se unen en Catalina Rojas, una artista que ha conjugado las raíces campesinas con escenarios urbanos desde los años '70 a la fecha. Ha trabajado junto a recopiladores del folclor como Gabriela Pizarro y Patricia Chavarría, y fue la más próxima colaboradora de Roberto Parra, con quien se casó y junto al cual se dedicó a cantar en calles y mercados durante los duros primeros años de dictadura militar. Con cuatro discos grabados a contar de 1986 y canciones como el vals "Puerto esperanza", de su hermano Dióscoro Rojas, la cantante actúa además al frente del grupo La Filarmónica de la Cueca y en actividades y escenarios como las fondas y cumbres guachacas cada año.
Voz, rostro, y figura referencial del grupo Juana Fe, que integró desde 2004 Juanito Ayala dejó la banda tras cumplir tras diez años al frente, y emprendió un proyecto como cantor en solitario. Durante 2010, en una estadía en México, había comenzado a mostrar sus primeras canciones propias, en paralelo a sus trabajo con Juana Fe. y en 2014 presentó su primer disco personal, Santo y seña, que tuvo varios temas sonando en radios, como "Dos veredas", donde lo acompaña el músico argentino Kevin Johansen, y "Tanta música". Su nuevo camino ha seguido ampliando los ritmos que distinguieron su paso por Juana Fe, y que lo han convertido en uno de los más llamativo solistas de su generación.
La Nueva Canción Chilena tuvo muchas voces solistas destacadas, y la de Osvaldo Gitano Rodríguez se distingue por al menos dos características. Primero, legó a la canción popular chilena un himno imperecedero, independiente incluso de la época que lo vio nacer, como ha sucedido con su "Valparaíso". Pero además el cantautor, poeta y dibujante porteño buscó documentar el momento y los ambientes que protagonizaba, con libros y textos valiosos para comprender mejor el ambiente artístico de su época, escritos durante su exilio en Europa. En ese continente Rodríguez profundizó su interés por la literatura (llegó a publicar dos poemarios, un libro de cuentos y la novela El día que me quieras) y mantuvo estudios universitarios, razón por la que su carrera discográfica es muy breve, con sólo dos discos originales: Tiempo de vivir (1972) y Los pájaros sin mar (1976), más un tercero en vivo editado en 1989 por el sello Alerce.
Cantora magallánica, poeta y viajera, Naara Andrea González Iglesias tomó de su abuela materna el adjetivo de "andariega" para bautizarse en la música popular y emprender con ese rasgo un espíritu de trashumante que la ha llevado a distintos confines del continente, desde el último borde de Punta Arenas, donde nació, hasta la ciudad de Buenos Aires, donde ha realizado gran parte de su vida como Naara Andariega. Su primer disco autoral y conceptual llegaría casi una década más tarde de esos primeros recorridos: Cardinal (2021).
Trovador formado en las postrimerías de la dictadura, David Azán fue integrante del grupo de música latinoamericana Coré durante los años '90, donde actuaban músicos como Manuel García y los futuros integrantes de Inti-Illimani, Daniel Cantillana y Christian González. Alumno del compositor y profesor Fernando Carrasco, referente en la música latinoamericana a través de las décadas, Azán ha sido a la vez que autor de canciones y cantor, arreglador, sesionista, productor discográficos y diestro guitarrista. Sus trabajos en este ámbito se diversifican desde el acompañamiento para el canto comprometido de Rebeca Godoy, hasta su decisiva mano en álbumes tan distintos como Viñeta (2010), del propio Daniel Cantillana, y Hecho a mano (2012), de la cantautora pop Jazmín Gómez. Sus discos solista son Pop de palo (2015) y Canto forastero (2018).
El trabajo de esta cantautora ha mostrado un inusual equilibrio entre fuerza y fragilidad, entre pasión y melancolía. «No sé de dónde sale esta fuerza / la que acompaña siempre a mi voz / piensan que sale de mis pulmones / yo pienso que nace en mi convicción», dice uno de los versos incluidos en su primer disco, Malvarrosa (2013). Se llama Javiera Bobadilla, pero prefiere presentarse como La Pájara, y ésa es sólo una de las peculiaridades de esta creadora, con estudios de música en Chile y España, y la disposición a hacer de sus canciones una plataforma de intensa expresión emocional. En 2014 ganó la Gaviota en la competencia folclórica de Festival de Viña del Mar con la canción "La retirada", y en paralelo obtuvo un segundo galardón a la mejor intérprete.
Cantautor, multi-instrumentista, productor musical y viajante sin destino definido, Max Zegers es cultor de un pop mestizo de ciertas proximidades a Pedropiedra o a Fernando Milagros, que se nutre de diversos sonidos recogidos en lugares de América Latina que ha recorrido, aires y ritmos de las raíces folclóricas, y desde luego de una poesía trovadoresca obtenida del linaje al que pertenece, dado que es hijo de Julio Zegers. Como nombre propio, Max Zegers ha publicado los discos Día uno (2013) y Pueblos (2018), capítulos que exponen su experiencias en ruta.
Una de las cantautoras independientes más interesantes surgidas en la década de 2010 es la portomontina Sara Pozo. Pianista, acordeonista, guitarrista, violonchelista y con un trabajo poético sobre temas existenciales pero también sociales y medioambientales, ha venido desarrollando una propuesta que mezcla influencias del folk, la música pop de sus tiempos y el folclor sureño que ella conoció siendo niña en la Península de Chayahué. Su primer disco es Atmósfera (2016), un caleidoscopio de esas coloridas líneas musicales que se entrecruzan en el movimiento.
Francesca Ancarola es una figura de la música popular de fin de siglo, que toma elementos de la tradición latinoamericana y las fusiona con músicas de sus tiempos. Si bien comenzó su carrera en los años '80 (con un premio como intérprete en un festival organizado por la revista La Bicicleta y el Café del Cerro, dos ejes del Canto Nuevo), forma parte de la oleada que renovó el género a fines de la década siguiente, reconocible durante esos tiempos bajo el concepto de "novísima canción chilena". Las coordenadas que agrupan a esta generación son básicamente tres: raíz folclórica, textos poéticos de crítica social, y música que desde la academia inician una transformación de la raíz con una mirada contemporánea.
La de Quelentaro fue una carrera extensa y marginal a los medios masivos de difusión, sostenida en una poesía solemne, cercana al mundo obrero del que provenían sus integrantes. Aunque nacidos como un grupo, casi toda la historia de Quelentaro fue la del dúo afianzado entre los hermanos Gastón y Eduardo Guzmán, cantautores capaces de sostenerse mutuamente incluso durante el quiebre impuesto por el exilio.
Luego de la primera separación de Santiago del Nuevo Extremo, a mediados de los años ochenta, el cantautor Luis Le-Bert comenzó un trabajo individual que se ha mantenido ininterrumpido hasta hoy. Su estilo autoral y su sistema de promoción ha respondido durante este tiempo a una irrestricta autonomía, manteniéndolo como una voz creíble y digna de atención, aunque marginal a la difusión masiva. El tránsito desde la trova hacia la cueca en subjetiva lectura es uno de los senderos por los que darle coherencia a su inquietud musical solista, autodefinida por él como «canción de vanguardia».
El canto, el guitarrón, la paya y la poesía popular son todos ingredientes de la tradición que se encuentran en Pedro Yáñez, uno de los más persistentes cultores del canto en Chile. Nacido en la ciudad sureña de Campanario, conoció desde esa cuna la raíz tradicional antes de llegar a Santiago, donde estuvo entre los fundadores de Inti-Illimani y del Dúo Coirón e inició su carrera entre movimientos tan principales como la Nueva Canción Chilena, el Canto Nuevo y el canto a lo poeta, del que ha sido uno de los mayores impulsores hasta hoy. Un nuevo hito en su camino fue el popular elenco de payadores que formó en 1980 junto a Santos Rubio, Jorge Yáñez y Benedicto Piojo Salinas, previo a su trabajo desarrollado desde entonces como abanderado de la paya en asociación con Eduardo Peralta y Cecilia Astorga, entre otros. En 1999 ganó el Premio Nacional de Música Presidente de la República.
Quizás por haber vivido su infancia y juventud en países tan distintos y distantes como Chile, Japón, Italia y Brasil, Vasconcellos creó un tipo de canción que ha buscado el arraigo en sonidos originarios, especialmente de América Latina, de donde son también sus orígenes sanguíneos. Su fórmula finalmente dio con canciones alegres, festivas y con explícita conciencia social y cultural. Desde su salida del grupo Congreso, en 1983, el músico se desarrolla de modo solista, y con altas cumbres de popularidad en esa área. Su influencia en toda una generación de músicos, la masividad de sus canciones y su intensa y poderosa actividad en vivo lo convierten en una figura vigente y fundamental de la música de fusión desarrollada en nuestro país.
La música fue inspiración familiar en el caso de Jaime Atria Rosselot, cantautor solista, productor, compositor e integrante de varios grupos; hijo del famoso autor de "La consentida" y "Noche callada", Jaime Atria. Festivales de la canción estudiantil fueron su espacio más prolífico de difusión durante los años setenta, aunque han sido voces ajenas las que más han dado a conocer sus composiciones. Gente como Alberto Plaza, Magdalena Matthey, Eduardo Gatti, Juan Carlos Duque, Gloria Simonetti, Pedro Messone y Osvaldo Díaz han grabado canciones suyas.